El acceso, permanencia e inserción laboral de los jóvenes cubanos sigue siendo un desafío en este nuevo contexto que vivimos, aseguraron recientemente académicos y especialistas del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, al participar en el Congreso Internacional de Investigadores sobre infancias, adolescencias y juventudes.
David Lahera Rodríguez, funcionario del Comité Central del Partido, dijo que hoy existen más carreras en ofertas que estudiantes optando por ellas. Es algo, recordó, que preocupa, como también el desinterés de los jóvenes por no vincularse muchas veces con un centro de trabajo después de graduarse.
Asimismo, la Doctora Niuva Ávila Vargas, profesora de la Facultad de Sicología en la Universidad de La Habana, explicó que es inquietante cómo existen, en algunos casos, estudiantes en nuestras universidades que aspiran solo a tener un título y luego se desconectan de la vida laboral relacionada con sus carreras.
Además, agregó que no podemos hablar de inserción laboral sin pensar en las condiciones del presente. Es la emigración uno de los principales problemas que frena ese vínculo cuando los jóvenes culminan la universidad, al tiempo que hace repensarnos cuánto más podemos realizar para atraerlos hacia su desarrollo pleno desde lo profesional.
Por su parte, la Doctora Laura Domínguez García, también del Alma Máter capitalina, dijo que la etapa de la pandemia y las condiciones económicas del país han sido obstáculos que desmotivan laboralmente a determinados jóvenes.
En otro momento, recordó que constituye esta una situación que debemos revertir en un período corto de tiempo. Se necesita enamorar más a los jóvenes y que sean ellos quienes vean sus perspectivas y sueños realizados en el centro de trabajo en el que finalmente se ubiquen.
Pero no solo estos retos quedan por concretarse en el ámbito cubano, otros más objetivos también golpean a los estudiantes en su vínculo laboral. Según la ingeniera Yumerky Santana Delgado, especialista del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, en varias ocasiones las tesis de licenciatura o maestría que tienen un determinado valor para el país quedan engavetadas, y eso desestimula al joven profesional.
